Crean un registro digital para el control fiscal y la identificación de expendedoras

HOSTELVENDING.com 23/06/2014.- Con el objetivo de acabar con el fraude empresarial que rodea la instalación de expendedoras en Puerto Rico, el Gobierno del país dio el pasado viernes el visto bueno al Proyecto de la Cámara 1785, que va a impulsar en los próximos meses la creación del Registro Digital de Máquinas Expendedoras.
Para llevar un control de todas las máquinas instaladas en la isla, con su ubicación, su certificado y su propietario, los operadores estarán obligados a colocar en cada una de ellas un marbete digital, una especie de código de barras con el que la Administración tendrá acceso a la identificación de su licencia, los certificados exigibles según cada caso, los permisos u documento para llevar a cabo alguna actividad comercial.
Con este mecanismo, se podrá verificar toda la información relacionada sobre la localización de las máquinas y si incumplen con los pagos y permisos correspondientes.
Puerto Rico no se libra de la crisis económica y fiscal que vivimos en la actualidad y esta medida se enmarca dentro de las acciones impulsadas por el Ejecutivo para mejorar los ingresos en las arcas públicas a través del control de las actividades comerciales.
"La industria de las máquinas expendedoras data de los años cincuenta. Dicha industria genera ingresos considerables a sus respectivos dueños, en comparación a su inversión. Son múltiples los comerciantes que se benefician a diario de los ingresos obtenidos en las ventas que generan dichas máquinas, sin embargo, muchos no tributan por sus ingresos y tampoco remiten el respectivo pago recaudado del impuesto sobre ventas y uso al Departamento de Hacienda, entre otras violaciones legales. Ello amerita la creación de un mecanismo efectivo que le permita al Estado reconocer a los comerciantes que no cumplan con las disposiciones legales aplicables". Así se explica en la exposición de motivos del texto por el que se crea este Registro Digital.
El propósito de dicho marbete es permitirle al Gobierno la fiscalización continua de dichas máquinas, a los fines de recaudar lo que le corresponde al erario.
"En un supuesto que existan un total de doscientas mil máquinas expendedoras alrededor de la Isla, teniendo en cuenta que la gran mayoría no está siendo contabilizada para efectos contributivos, los ingresos obtenidos mediante la fiscalización resultarían de gran beneficio para fortalecer los servicios que el Gobierno brinda a su gente", aseguran.














