El resurgir de un negocio de la mano del vending tras el golpe de la pandemia

HOSTELVENDING.COM 19/04/2021.- Ubicada en Maryland (E.E.U.U), la máquina expendedora del negocio de Fawehinmi, ofrece shawarmas congelados que se pueden calentar y servir al instante. Una reconfiguración de su negocio que le ha permitido seguir ofreciendo creaciones de sus orígenes nigerianos y brindar a los ciudadanos una opción rápida, contactless y disponible 24 horas.

Muchos emprendedores y startups, tras sentir el deseo de iniciarse en el mundo de la restauración, el estallido de la COVID-19 ha puesto de manifiesto el poder de la distribución automática para salvar los negocios, que ahora cuentan con máquinas vending para continuar ofreciendo sus menús. 

Y esa es precisamente la historia de Kaosarat Fawehinmi, la estadounidense de origen nigeriano, que decidió comenzar su andadura por el sector de la restauración a través de una oferta atractiva y diferente: platos inspirados en su tierra natal.

El desenlace ya lo conocemos: llega la pandemia, y con ella, el cierre del restaurante. Un tiempo que le sirvió para reflexionar, y, como tantos otros, descubrió en el vending un chaleco salvavidas. Tal y como explicaba Fawehinmi a un diario estadounidense, se dio cuenta de que cerca de su restaurante, pasaban muchos trabajadores que no tenían ninguna opción para comer entre horas y durante la jornada, ya que la restauración permanecía cerrada, y fue ahí cuando encontró en la distribución automática la posibilidad de ofrecer ese servicio non-stop.

Máquina expendedora de Shawarmas nigerianos 24 horas

En ese momento, comenzó su búsqueda de fabricantes de máquinas vending de producto congelado, que culminó con la selección de Fastcorp Vending LLC, una compañía que además emplea brazos robóticos para trasladar el producto desde el congelador el cajón.

La máquina de shawarma Laud ofrece siete variedades de shawarma al estilo nigeriano preparado de forma casera por la propia Fawehinmi, que cocina los shawarmas, los envuelve y los congela: pollo, ternera, salchicha y diferentes tipos mixtos; a modo de aderezo, vienen acompañados con kétchup y mayonesa.

Con una capacidad de 130 productos, los shawarmas vienen envueltos en papel de sándwich y su precio ronda los 5 euros. En cuanto a la reposición, se produce cada dos semanas en el caso del pollo, y tres en el resto de carnes.

Pese a que las máquinas no calientan el producto, hay ubicados varios microondas para poder comerlo on the go o incluso poder llevarlos a casa y calentarlos allí: una opción perfecta para estudiantes, trabajadores y, en realidad, cualquier consumidor que quiera una opción rápida, casera y exótica.

Esta historia es una más de las que demuestran el poder que está ganando día tras día la industria de la distribución automática, y su papel estratégico en el foodservice: allá donde haya una máquina automática, habrá esperanza.