Frío como el hielo: la importancia de un buen dispensador

HOSTELVENDING.COM 10/07/2020.- En muchos casos, el ingrediente mágico que une a multitud de bebidas: el hielo. Pero no basta con disponer de “cubitos” de hielo para conseguir un resultado excepcional; es muy importante tener en cuenta una serie de factores para utilizarlo correctamente.
Expertos como el fundador de la European Barender School, Mads Voorhoeve y Paul Swaen, director del experto fabricante de hielo Hoshizaki, nos esclarecen que la primera regla a tener en cuenta es la cantidad a utilizar. En este caso, el secreto reside en emplear grandes cantidades de hielo, ya que, a juicio de Swaen, cuando el hielo se derrite en una bebida, la diluye, a costa del sabor, ¿su consejo? “Cuanta más agua utilices, más lentamente se derretirá”.
Una afirmación que suele chocar con la concepción de los consumidores, que piensan que, precisamente, el uso de mucho hielo va en detrimento de la calidad de la bebida: “piensan que les engañamos si servimos un vaso lleno de hielo, cuando lo que conseguimos es mejorar la calidad de la bebida”.
El tamaño de los cubos de hielo, ¿importa?
Tras esto, el siguiente paso será elegir los cubitos de hielo correctos. Y es que no todos son iguales; el director de Hoshizaki nos revela que, cuanto más duro y transparente es el hielo, menos oxígeno contiene, y por tanto, tardará más en derretirse. En ese sentido, ¿cuál es el tamaño ideal de los cubitos de hielo? Para Swaen, si bien pueden tener cualquier forma y tamaño, el formato habitual es de 28 x 28 x 32 milímetros.
Encontramos la medida de hielo “nugget”, que es muy duro y se comprime mediante una técnica especial, por lo que se corta en trozos con una máquina. Por su parte, Voorhoeve añade que también dependerá de la bebida que desees preparar, pero que, en cualquier caso, siempre se querrá controlar el hielo para saber cuánta dilución se produce: “no es lo mismo un mojito, que necesita mucha dilución, que un gin-tonic, que pide todo lo contrario”.
Dichos elementos: dureza y claridad, los dos valores a tener muy cuenta en el hielo, vienen determinados en gran parte por la tecnología utilizada.
Soluciones a medida: dispensadores para un servicio desatendido
Hablando de tecnología, cabe mencionar a los dispensadores, que juegan un papel fundamental cuando se trata de ofrecer hielo (o agua) en multitud de segmentos de negocio, todos basados en el autoservicio.
A la hora de escoger un dispensador para incluirlo en sectores como el vending: junto a otras máquinas de bebidas para ofrecer todo un corner premium en diferentes espacios como hoteles, restaurantes, y, en definitiva, todas aquellas localizaciones que demandan un modelo desatendido, es crucial tener en cuenta: uso de hielo de calidad, un almacenamiento higiénico y la velocidad del servicio.
Y, hablando de localizaciones, este tipo de soluciones podrían ser muy útiles en entornos donde el coffee to go y, en general, la distribución automática, está cobrando mayor peso: las estaciones de servicio. Imagina poder contar con un dispensador de hielo en la gasolinera; paras a repostar y de paso te llevas un buen iced coffee o incluso una bebida refrescante con un hielo de calidad que le da ese valor añadido (sobre todo en los meses de verano). Quizás es hora de introducir en ese segmento este tipo de máquinas.
Bastará con apretar un botón para obtener hielo para tu bebida favorita, extraída de la máquina automática. Frente a ello, Hoshizaki se alza como uno de los fabricantes y distribuidores de máquinas dispensadoras de hielo y sistemas de refrigeración más destacados, quienes persiguen el objetivo de dar respuesta, a través de sus soluciones, a entornos donde se requiere un servicio rápido, eficiente e higiénico.
Además, los dispensadores permiten controlar de forma intuitiva la cantidad de hielo suministrada; hecho que ayuda a reducir la merma tanto de producto como de energía. Además, Hoshizaki propone el uso de refrigerante HC natural R290, que reduce aún más el consumo energético.
En ese sentido, desde la compañía, ofrecen todo un portafolio de dispensadores que se adaptan a a diferentes requerimientos en cuanto a cantidades de servicio, capacidad de almacenamiento y limitaciones de espacio.Encontramos el formato DIM, con la que apuestan por las zonas desatendidas a través de un control de dispensación de configuración intuitiva. “Su hielo es muy adecuado para múltiples entornos, incluyendo alimentos y bebidas, catering, ocio y asistencia sanitaria”, comentan desde Hoshizaki.
Por otra parte, destacan los modelos DCM, ideales para localizaciones con limitaciones de espacio. Así, el grupo propone diferentes combinaciones: agua, hielo o ambas. Asimismo, cuentan con otro dispositivo, el dispensador DSM, que se presenta como el más compacto de la gama. Mediante un diseño simple y la posibilidad de incluir “extras”, se suele emplear en segmentos como Hospitales e instituciones sanitarias.

Así es, es necesario otorgar al hielo la importancia que se merece para un resultado de calidad. Desprendámonos de la idea de que cualquier hielo sirve: como diría Voorhoeve, es “básicamente un nutriente; es comida. Trátalo de la misma manera”. Y más ahora, con la llegada del verano, poder contar con un buen cóctel, refrescante y sabroso es todo un alivio para esos días donde el calor acecha.














