Grandes casos de uso del autoservicio: La recarga electrónica de vehículos

HOSTELVENDING.COM 11/03/2024.- En el marco de la sostenibilidad, uno de los pilares fundamentales es la transición hacia los vehículos eléctricos (VE). Este cambio, impulsado por la necesidad de reducir las emisiones de carbono, ha desencadenado una transformación en nuestras carreteras, con una proyección que apunta a que para 2025, el 30% de todos los vehículos nuevos vendidos en Europa serán eléctricos. Sin embargo, este ambicioso objetivo plantea desafíos cruciales, uno de los más destacados: la infraestructura de recarga.
En la actualidad, Europa cuenta con unas 375.000 estaciones públicas de recarga, pero para 2030 se estima que esta cifra deberá multiplicarse a al menos 3,4 millones, lo que representa un despliegue sin precedentes. Este incremento exponencial implica la expansión de la red de cargadores, y al mismo tiempo, la implementación de soluciones de pago desatendidas, capaces de satisfacer las diversas necesidades de todos los implicados en esta infraestructura.
Los pagos, por tanto, se erigen como una pieza esencial en esta compleja ecuación. La demanda de soluciones de pago integradas y robustas es masiva, abarcando desde estaciones de servicio hasta empresas de aparcamiento, minoristas y centros comerciales. Es necesario un hardware de aceptación fácil de integrar, fiable y seguro, capaz de potenciar instalaciones de recarga de todo tipo, desde las más pequeñas hasta las grandes redes nacionales.
La comodidad juega un papel crucial en la adopción masiva de los VE. Facilitar el proceso de recarga, minimizando los tiempos de espera y simplificando los pagos, resulta fundamental para atraer a un mayor número de usuarios. En este sentido, las características de pago desatendido se convierten en aliadas clave:
1. Tap and go: La mayoría de las transacciones se realizarán sin contacto, ya sea con tarjetas o mediante monederos digitales desde smartphones. La aceptación sin contacto se vuelve imprescindible en esta era digital.
2. Omnicanal: La posibilidad de pagar a través de una aplicación proporciona una ventaja añadida, especialmente para viajeros frecuentes y flotas de vehículos, simplificando el proceso y ofreciendo mayor comodidad.
3. Construcción Robusta: Dado que muchas estaciones de recarga están expuestas a condiciones meteorológicas adversas, es vital que los dispositivos de pago sean resistentes y fiables, garantizando un funcionamiento continuo.
4. Multi-Conectividad: La capacidad de aceptar pagos a través de aplicaciones es un requisito cada vez más demandado por los usuarios. Para ello, es crucial que los puntos de recarga estén conectados y puedan confirmar transacciones digitales de manera eficiente.
5. Actualizaciones por Aire: Los dispositivos de pago avanzados ofrecen actualizaciones de software remotas y parches de seguridad, reduciendo costos operativos y facilitando el mantenimiento.
6. Seguridad: Por supuesto, la seguridad es una prioridad absoluta. Los dispositivos de pago deben cumplir con los más altos estándares de seguridad para proteger tanto a los proveedores de recarga como a los usuarios.














