La crisis de suministros pone a los operadores de vending contra las cuerdas

HOSTELVENDING.COM 17/12/2021.- La crisis actual en la cadena de producción y suministro está obligando a los proveedores de alimentación a subir los precios de los productos destinados al vending.
Durante los últimos meses, hemos sido testigos de otra crisis, que aparejada a la provocada por el Covid-19, pone a las industrias contra las cuerdas. En este caso, nos referimos a la provocada por la falta de disponibilidad y su consiguiente aumento del coste de las materias primas, y por ende, un incremento desmesurado de los precios de los productos.
Una situación que afecta a diferentes sectores y de la que no escapa, evidentemente, la distribución automática. A pesar de que algunas compañías han decidido asumir dichos costes de manera que no repercutan –o lo hagan de forma muy ligera- en el precio final de la oferta de las expendedoras, la realidad se impone: los meses de dureza y las pérdidas de la pandemia obligan a subir los precios de los artículos. Se trata de superviviencia.
Por su parte, los fabricantes de alimentación y bebidas se ven obligados a notificar a sus clientes: distribuidores y operadores de vending, el aumento en su tarifario, unos emails que están tensionando los acuerdos, y provocando un nuevo reajuste en las estrategias comerciales y financieras de las empresas dedicadas al sector.
A esta problemática se suma una subida en los precios de la luz sin precedentes; a los proveedores tampoco les salen las cuentas.
Y así, llegan al email diversos mensajes de fabricantes de la industria alimentaria a las empresas operadoras de vending, con ejemplos como Velarte, Ñaming o Pascual, entre otras tantas, quienes están comunicando la subida de precios de sus productos, lo que justifica el aumento del tarifario de la máquina expendedora.
A estas presiones se unen la demanda creciente de artículos de alimentación más frescos y de calidad, factores a los que productores no quieren renunciar. Hablamos entonces de subidas de hasta un 50% respecto a las materias primas con las que trabajan los fabricantes.
En el peor de los casos, la situación muestra su intensidad a manos de un incremento de hasta el 400% en materias primas como electricidad y gas.
Frente a ello, desde compañías como Ñaming, dedicada a la elaboración de sándwiches y otros productos de alimentación referente en vending y una de las principales en España, notificaron a sus clientes la necesidad de aumentar un 7% el precio de sus productos para vending tras varios meses tratando de evitarlo, con el objetivo de intentar equilibrar los incrementos a los que se enfrente la compañía tanto en las materias dedicadas a los embalajes y envasado, la energía en las fábricas hasta pasar por las materas para la producción de su oferta alimenticia: trigo, aceite…
No son los únicos, la mayoría de empresas productoras han decidido tomar esta medida para poder solventar los cada vez más crecientes gastos en su actividad. La situación es insostenible y demanda una actuación inmediata; la industria alimentaria, una de las principales no solo a nivel nacional, también mundial, necesita aliviar las cargas que viene soportando desde que irrumpiera la pandemia, y que se acrecientan ahora con una retahíla de problemáticas que ponen en riesgo multitud de puestos de trabajo en nuestro país.


 
                    
                 
                    
                 
                    
                 
                    
                 
                    
                 
                    
                 
                    
                 
                    
                 
         
     
        

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