La industria recurre a los juzgados para derogar el impuesto catalán al azúcar

HOSTELVENDING.com 16/11/2017.- Coincidiendo con la excepcionalidad institucional en la que se encuentra Cataluña, la industria alimentaria ha decidido unirse para luchar contra un impuesto que consideran injusto y parcial con es la tasa al azúcar que entró en vigor el pasado mes de mayo.
La principales organizaciones que representan a las empresas de la cadena alimentaria, la distribución y la restauración hacen piña para presentar un recurso contencioso administrativo ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña contra el Reglamento del Impuesto Catalán (IBAE) a las bebidas azucaradas envasadas, tal y como ha hecho público la patronal.
Entre los colectivos integrados están las asociaciones del sector agrario (ASAJA, COAG, UPA), Cooperativa Agroalimentarias, AECOC, de la industria (FIAB y PROMARCA), de los sectores de la distribución (ANGED, ASEDAS, ACES), y de la restauración (Marcas de Restauración) que defienden a un sector que, según sus propios datos, contribuye en más del 15% del PIB nacional y más del 22% del empleo total del país, lo que supone unos 4,3 millones de empleos.
Consideran que la norma vulnera principios como el de territorialidad, obstaculización de la libre circulación de mercancías y servicios en el territorio español, el principio de prohibición de doble imposición no coordinada, de seguridad jurídica, el de igualdad y no discriminación, y la libertad de circulación de mercancías, entre otros.
Además, manifiestan que el IBAE, contra el que se ha solicitado al Gobierno presentar un recurso de inconstitucionalidad, “genera a la cadena agroalimentaria que opera en Cataluña una pérdida de competitividad por las cargas desproporcionadas que suponen para las empresas y la consecuente inseguridad jurídica”.
Las organizaciones que han presentado este recurso, anunciado el pasado mes de julio, reiteran la necesidad de detener esta norma, de carácter recaudatorio que afecta muy negativamente a un sector motor de la economía española y primer sector industrial del país.
La inestabilidad política en Cataluña siembra dudas en la industria del vending














