La necesidad de convertir al vending en un servicio completamente touchless

HOSTELVENDING.COM 30/07/2020.- Ante la transacción sin contacto como única dirección en la mayoría de las industrias, el sector del vending no puede limitarse a ofrecer el método de pago cashless: debe ofrecer la opción de interactuar con la máquina automática de forma totalmente contactless, sin tener que manipularla durante todo el proceso de compra. 

Si echamos la vista atrás -y no hace falta irse muy lejos- veremos que la experiencia del consumidor ha cambiado vertiginosamente a lo largo del tiempo; alcanzando en estos últimos meses el culmen de la transformación digital. Los ciudadanos ya no quieren ir a los establecimientos y espacios físicos -si pueden evitarlo-, sino que abrazan la compra online y las aplicaciones móviles.

El mercado ha reestructurado su oferta de servicios en cuanto al delivery, recogida fuera de los establecimientos, taquillas inteligentes y, en definitiva, modelos desatendidos; han dejado de ser una aparición anecdótica para pasar a ser la principal forma de transacción. Las compañías han comprobado la fuerza de la innovación y han hecho de ella su prioridad.

Trasladándonos al sector de la distribución automática y el vending, parece que la experiencia por parte del consumidor no ha cambiado realmente tanto si la comparamos con otras industrias. El vending ya era contactless, al menos en los métodos de pago, y automatizado; pero no por ello hay que conformarse con el servicio que se ofrece: también es necesario plantearse nuevas innovaciones y una transformación radical de las máquinas expendedoras.

¿Por qué? Porque, como decíamos, si bien las dispensadoras permiten el pago sin efectivo, con tarjetas contactless y aplicaciones móviles, lo cierto es que hasta ahora, el consumidor tenía que tocar la máquina para el resto de la transacción: presionar los botones o la pantalla táctil para escoger el producto, por ejemplo. 

No se puede hablar de experiencia contactless introduciendo simplemente métodos de pago sin contacto; la transformación ha de ser radical.

Y para que esto sea posible, ha de ser el propio sector el que empiece a introducir cambios integrales; otorgar a sus soluciones de una mayor tecnología, dando paso a un auténtico Smart Vending.