Llega a Vitoria la primera máquina de vending de periódicos, de la mano de Azkoyen

HOSTELVENDING.COM 24/06/2020.- La máquina expendedora, instalada en el exterior de una librería, permite obtener el periódico con la tarjeta de suscripción al medio, o a través de pagos tradicionales. 

Grupo Azkoyen, especializada en la fabricación de soluciones tecnológicas referente en vending, apunta al mundo de la prensa con su máquina expendedora de periódicos en Vitoria, pionera en la ciudad. La instalación corre a cuenta de Urkotronik, su distribuidor en el País Vasco.

Por fin ha llegado la ansiada nueva normalidad, pero esto no supone el fin de las medidas contra la pandemia; podríamos decir que ahora son incluso más importantes si queremos avanzar en este camino y no volver al principio de la pandemia. Por su parte, las empresas del sector de la distribución automática trabajan diariamente por ofrecer sus soluciones para facilitar que las medidas de prevención se apliquen.

Autoservicio, máquinas expendedoras en la vía pública y los medios de pago digitales son características que quiere alcanzar cualquier negocio, y cada vez son más los que cuentan con el vending para mantener su canal de venta e ingresos.

Tal es el caso de una librería vasca, Arlekin, quienes han decidido instalar una máquina expendedora para distribuir sus productos. El objetivo: evitar las aglomeraciones que se estaban produciendo en el interior del establecimiento. Para ello, han decidido confiar en Azkoyen, la multinacional navarra, cuyo último proyecto se había producido en Eibar, con la instalación de sus máquinas de EPIs.

Una de las novedades de estas máquinas de prensa es que admiten el pago con las tarjetas de suscripción al medio, pero también los métodos más comunes como la tarjeta de crédito o el efectivo. Respecto a las primeras, se entregarán a los usuarios suscritos al medio, que ya tienen pagada la prensa diaria, para que puedan hacerse con ella a través de las automáticas.

Y para mantener las medidas de higiene y seguridad, junto a la máquina de vending, se ha establecido un dispensador de gel hidroalcohólico a disposición del cliente para que lo utilice antes y después de manipular los botones.

Convertidas en auténticas máquinas de prensa, inicialmente dispensaban refrescos y snacks. Una muestra más de que el vending no para, sino que se adapta para ofrecer un servicio constante de cualquier demanda. Tanto es así que el propietario de la librería ya se está planteando el siguiente nivel: vender libros a través de las máquinas.